El Colegio de Abogados de Ciudad Real con motivo de la celebración del Día Internacional de la Mujer ha acordado otorgar la distinción de «ABOGADAS PIONERAS» a las primeras mujeres de la provincia de Ciudad Real que tuvieron la valentía de colegiarse y ser abogadas en un mundo casi exclusivo de hombres. Sus flamantes togas abolieron siglos de prejuicios y desventajas económicas para la mujer. Todas ellas, con altísima calidad humana y jurídica, abogaron por defender los derechos de mujeres y hombres, contribuyendo a una igualdad efectiva, sin apenas ser conscientes de que su callado trabajo cotidiano, rompía moldes, fracturaba techos de cristal y derribaba barreras que habían sido infranqueables hasta entonces.

El galardón de Amparo Mesía de la Cerda Ballesteros, colegiada en 1980, se concederá a título póstumo. Fue una mujer polifacética y una abogada de raza, la primera que accedió a la Junta de Gobierno del Colegio de Abogados de Ciudad Real.

Pilar Zarco Daza, que también ha pertenecido a la Junta de Gobierno, Inés Montoya y Aurora Lorido Rodríguez, colegiadas en 1981 y 1982, han ejercido en Tomelloso, Ciudad Real y Puertollano, respectivamente; en su haber, una dilatada trayectoria profesional como juristas.

Es más, tanto Inés Montoya como Pilar Zarco, pese a sus largos años de dedicación, aún continúan atendiendo un servicio tan exigente y sacrificado para los profesionales como es el Turno de Oficio.

En próximas fechas, tendrá lugar un acto de homenaje en el que se procederá a la entrega de las distinciones, con el fin de que este reconocimiento alcance la visibilidad y relevancia que sus protagonistas merecen.